domingo, 10 de febrero de 2008

¿Cómo se conforman las bibliotecas escolares y de aula?


Dice el diccionario que un acervo es un conjunto de
bienes o valores, generalmente poseídos en común
por un grupo o colectividad. Un acervo bibliográfico, como
es el caso de los materiales que están recibiendo, puede
ser entendido entonces como un bien común, perteneciente
a la comunidad escolar (directivos, docentes, alumnos y
familias), orientado a servir como eje de los procesos de
formación de lectores y aprendizaje desde la educación
básica.
Por lo tanto, no se trata en este caso de un conjunto de
libros elegidos al azar, sino de un todo con sentido, en el que
cada libro ha sido cuidadosamente seleccionado en concordancia
con los otros títulos que lo acompañan, atendiendo a
la diversidad de lectores que puedan tener, y en congruencia
con los objetivos que la escuela secundaria debe cumplir.
El uso y disfrute de los acervos bibliográficos entregados
a la escuela es una prerrogativa por igual de maestros y
alumnos. Son parte importantísima del soporte material de
los contenidos curriculares y sustentan la labor de formación
de los alumnos como lectores y escritores. Son mucho
más que un complemento didáctico o una colección con
fines meramente “recreativos”, y las actividades en la biblioteca
y el aula deberán tender cada vez más a descubrir y
desarrollar la necesidad de su uso constante.

Integración de los acervos

Es importante mencionar que los acervos que están llegando
a los planteles y a sus aulas fueron pensados y seleccionados
con la clara intención de que sean un puente de conexión
entre todos los grados y áreas de conocimiento y un
medio de comunicación entre todos los maestros. Dentro
del acervo encontrarán libros que no sólo se relacionan con
las diferentes materias a través de la lectura, sino que establecen
fuertes y cercanos vínculos con otros ámbitos que
van más allá de la escuela, que tienen que ver con nuestra
vida cotidiana y con lo que pasa en el mundo.
Para integrar las bibliotecas escolares y de aula de
preescolar, primaria y secundaria se consideraron nueve
aspectos generales: cinco relacionados con las características
de los materiales mismos, y cuatro relativos a los niveles
lectores que concurren en la educación básica. En esta
tarea, además, se sumaron opiniones y señalamientos de
especialistas y de la opinión pública.
Una consideración fundamental en este proceso de selección
—y que determina el desarrollo futuro de los acervos
en las escuelas— fue el de mantener la continuidad entre los
que fueron entregados en años anteriores y la presente selección,
al tiempo que se introducen novedades al catálogo.

Valoración de los títulos seleccionados

Calidad literaria. La calidad del texto, sea narrativo, poético,
expositivo, de divulgación, etcétera, está dada en buena
medida por la coherencia de la historia o del asunto
que se aborda, por la verosimilitud de lo que se plantea
y por el empleo eficaz de la lengua que, sin caer
en una rigidez artificial, debe poder llegar a diferentes
tipos de lectores.

Calidad de las ilustraciones. En la mayor parte de los libros
infantiles la ilustración posee un amplio valor significante,
de ahí que deba cuidarse que sea congruente
con el texto o bien que ofrezca elementos que fortalezcan
y amplíen las propuestas del mismo, de manera
que texto e ilustración apunten en la misma dirección
y no aparezcan divorciados. Colores, técnicas y estilos
deben coincidir con los contenidos, las atmósferas
y los giros lingüísticos.
Calidad editorial. En este caso debe considerarse la adecuación
del soporte a la propuesta de texto e imagen.
Tanto los materiales como el formato que sustentan la
obra deben ser durables, resistentes y acordes con la
edad y experiencia lectora del público al que estén
dirigidos los libros. En la medida de lo posible, el soporte
también debe hallarse en consonancia con el tipo
de obra: hay formatos tradicionalmente empleados
para la poesía, la narrativa, el ensayo, etcétera, que
conviene mantener como parte de la formación de una
cultura lectora; asimismo, en ciertos casos convendrá
optar por formatos y materiales innovadores según el
tipo de lector al que van dirigidos.

Temas y valores. Aunque las obras que se seleccionan no
están dirigidas específicamente a apoyar los temas del
currículo de educación básica, sí se procura que se
mantengan en consonancia con ellos. Con respecto a
los valores, se tienen como guía los que se derivan de
los derechos universalmente reconocidos para hombres,
mujeres, niños y niñas.

Pertinencia del material en la escuela. El libro, además de
poseer calidad literaria, gráfica y editorial, también debe
ser adecuado a las características del ámbito educativo
al que se dirija. En este punto se considera la organización
y el tipo de escuelas de la educación básica,
la realidad circundante y los intereses de lectura que
han podido detectarse entre alumnos y maestros.

Sobre los niveles lectores
Se han considerado cuatro series de acuerdo con los niveles
lectores que confluyen en la educación básica:
Al sol solito,
para los más pequeños,

Pasos de luna,
para los que empiezan a leer,

Astrolabio,
para los que leen con fluidez, y

Espejo de Urania,
para los lectores autónomos.

Esta organización no debe implicar una división rígida
de los materiales de lectura ni una actitud que impida
acercar a los alumnos a un libro originalmente destinado a
otro nivel. Los niños más pequeños pueden manifestar conocimientos
y habilidades de los que empiezan a leer o de
los que leen con fluidez, por ejemplo. La organización en
niveles lectores es sólo un modo de orientar las posibilidades
de lectura y nunca debe traducirse en una línea de acción
inflexible al momento de ofrecer los materiales a los
alumnos.
En cuanto a los libros incluidos en las series, los de Al
sol solito comprenden textos dirigidos a quienes inician su
entrada al sistema de escritura en un espacio formal, pues
sabemos que los niños tienen, en mayor o menor grado, conocimientos
diversos sobre la lengua escrita aun antes de
ingresar a la escuela, y a partir del contacto cotidiano con los
textos en su medio social. En este punto los niños diferencian
claramente entre texto e ilustración, se interesan por los aspectos
sonoros y gráficos de la lengua, identifican la
direccionalidad de la escritura, disfrutan que alguien lea para
ellos en voz alta, se apoyan en el contexto y los recursos gráficos
para anticipar el contenido de un texto, establecen similitudes
entre los hechos narrados y los que ellos han vivido,
“leen” los libros que les agradan o que alguien les ha leído.

De ahí que para este nivel se hayan buscado historias
breves y sencillas sobre situaciones cotidianas, susceptibles
de ser leídas en voz alta para que los niños las escuchen
o las manipulen por sí mismos libremente. Se escogieron
textos en prosa y verso, atendiendo especialmente a la
sonoridad de las palabras. Se procuró asimismo que los
soportes materiales fueran resistentes. Algunas características
que reúnen los libros elegidos son las siguientes:
• Historias sencillas donde el texto y la ilustración
están unidos armónicamente.
• Libros donde predomina la acción sobre la descripción,
donde se repiten estructuras o se establecen
patrones sonoros.
• Libros informativos de frases cortas que no falsean
la realidad ni se limitan a sustituir términos técnicos
por palabras cotidianas.
• Libros con números, abecedarios, palabras sueltas,
colores y formas.
• Historias basadas únicamente en la interpretación
de imágenes.
• Libros con partes móviles o ventanas que dan pie a
diversas posibilidades de interacción y manipulación.

Pasos de luna. Esta serie está dirigida a quienes ya se
han iniciado formalmente en la apropiación de la lengua escrita
y, en sentido estricto, ya leen y comienzan a establecer
significados a partir de lo que el texto aporta y de su propia
experiencia vital. En este momento los lectores son cada
vez más conscientes de que existen diversos tipos de texto
y se interesan por comentar lo que han leído, por aprehender
el sentido de las palabras nuevas y por realizar producciones
escritas personales.
Con base en ello, se buscaron en primer término narraciones
y poemas breves que impulsen a los niños a leer
por sí mismos, aunque puedan también ser acompañados
por un adulto. Se atendió no sólo a las cualidades sonoras
de las palabras sino al sentido de la lengua. Se buscó que
estos textos, profusamente ilustrados, aborden experiencias
cotidianas y fantásticas. En resumen, en esta serie se reunieron:
• Historias donde el texto y la ilustración están unidos
armónicamente y los lectores pueden sentirse
identificados con los personajes.
• Libros donde predomina la acción sobre la descripción,
donde se repiten estructuras o establecen
patrones sonoros o juegos de sentido.
• Libros informativos que no falseen la realidad ni
se limiten a sustituir términos técnicos por palabras
cotidianas.
• Secuencias narrativas lineales o reiterativas.
• Historias que incluyen diálogos.
• Historias basadas únicamente en la interpretación
de imágenes.
• Textos que exploran la sonoridad y el sentido de
las palabras.
• Asuntos basados en los ámbitos de la fantasía y la
realidad.

Astrolabio. Los lectores a los que se destina esta serie son
capaces de aproximarse por cuenta propia a textos diversos de
mayor complejidad narrativa y sintáctica; su grado de dominio
de la lengua les permite reflexionar sobre la organización de los
textos, y también los lleva a búsquedas más personales con
respecto a los temas y los géneros; de ahí que empiecen a buscar
libros de autores ya conocidos o similares a los que tiempo
atrás leyeron. Al mismo tiempo, están en un momento propicio
para releer y para consultar materiales de referencia que los
apoyen en su nuevas experiencias como lectores.

En cuanto a Espejo de Urania, la autonomía en la lectura
implica que se domina la lengua escrita de manera tal que
es posible seleccionar y comprender por uno mismo lo que
se lee. Por supuesto, esta autonomía no es un punto de llegada,
sino un proceso continuo, pues el desarrollo como
lector continúa durante toda la vida.

Entre las características de un lector autónomo, al cual
está dirigida esta serie, se hallan su capacidad para desentrañar
y establecer la organización lógica de los textos, las
relaciones temporales, espaciales y de causa efecto que se
plantean mediante la escritura, así como los distintos significados
de lo leído; de este modo, el lector realiza un esfuerzo
de contextualización y relación de un texto con otros, a la
vez que puede captar los distintos planos del lenguaje y las
sutilezas que éste implica.
Por lo anterior, se buscó que las obras dirigidas a este
nivel fomenten la reflexión entre los preadolescentes con temas
que les resulten cercanos, inquietantes o controvertidos.
Los libros podrán ser un apoyo para revisar problemas
y actitudes que se viven con frecuencia en este momento
vital, de modo que dichas situaciones puedan ser asumidas
con humor, empatía y generosidad. Algunas características
que presentan los materiales seleccionados de esta serie
son las siguientes:
• Secuencias narrativas lineales, en espiral y retrospectivas.
• Asuntos basados en la realidad, las tradiciones,
la historia, la fantasía y la ciencia ficción, con mayor
presencia de conflictos vitales y experiencias
conflictivas.
• Narraciones gráficas.
• Textos que exploran la sonoridad, el sentido y la
organización de las palabras: poemas en verso y
prosa.

Características, funciones y diferencias de las
bibliotecas

Las bibliotecas de aula y las escolares tienen características
y funciones distintas. Ambas se complementan y pueden
ir haciéndose, con el uso, necesarias para la impartición
de las clases, y para el desarrollo de la vida escolar y comunitaria.
A continuación, una exposición mínima de estos
dos espacios:
Bibliteca de Aula
• Al servicio cotidiano de las necesidades
del aula.
• Replantea la metodología y formas
de trabajo en el aula; diversifica
las formas de interacción
con los textos.
• El préstamo de libros se realiza
de una manera sencilla y ágil.
• La cantidad de materiales no es
muy amplia. Interesa más el contenido
que la cantidad; se busca
que responda de manera más
directa a las necesidades del currículo
y etapa de cada grado.
• Pueden hacerse préstamos entre
bibliotecas de diversos grados
y entre la de aula y la escolar.
• Permite lecturas compartidas y
enriquece fundamentalmente los
espacios de trabajo y lectura en
grupo.
• Permite que maestros y alumnos
se responsabilicen de la organización,
conservación y uso de
los materiales.
Biblioteca Escolar
• Al servicio de todo el centro
escolar.
• Amplía las posibilidades de búsqueda
y fomenta la necesidad
de la investigación.
• El préstamo implica una organización
importante.
• Pueden ser registrados multitud
de materiales (libros, revistas,
etc.) que en algún momento puedan
ser usados por algún lector
de la escuela. Prevé la diversidad
de lectores y necesidades.
• Pueden hacerse préstamos a las
bibliotecas de aula, así como solicitar
libros en préstamo a otras
bibliotecas de la comunidad.
• Debe garantizar fundamentalmente
espacios para la lectura
individual, sin descuidar por ello
el trabajo en grupo.
• Permite aprender normas de uso
preestablecidas.
Mecanismo de Prestamo

Biblioteca de aula
• Los alumnos pueden tomar los
materiales libremente, mientras
permanezcan dentro del aula.
• Los préstamos a domicilio serán
por fin de semana (llevar el viernes
y devolver el lunes), ya que
la colección es pequeña y podemos
necesitarlos en el transcurso
de las clases.
• El registro de estos préstamos
será público y muy sencillo (por
ejemplo, una cartulina con los
nombres de todos los niños y
una cuadrícula donde anoten el
título llevado en préstamo).
• Las reglas sobre uso y cuidado
de los libros serán acordadas y
diseñadas entre todos los alumnos
y el maestro.
Biblioteca Escolar
• Los alumnos pueden solicitar
préstamos dentro de la biblioteca.
Siempre que se pueda, la
biblioteca será de estantería
abierta.
• Los préstamos a domicilio pueden
solicitarse cualquier día de
la semana, y el plazo para la devolución
será pactado por el responsable
de la biblioteca junto
con los maestros y el director.
• El sistema de control y registro
de préstamos será claro, sencillo
y confiable. Todos los lectores
podrán entenderlo y manejarlo.
La biblioteca escolar no
puede cobrar multas en efectivo
o especie por retrasos o pérdidas
de materiales. Deben diseñarse
otras estrategias de recuperación.
• El responsable de la biblioteca
propondrá y elaborará un reglamento
de uso y cuidado incluyente
y respetuoso de los lectores.
Este reglamento estará
siempre a la vista, y sujeto a revisiones
periódicas.

3 comentarios:

Unknown dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Unknown dijo...

SOY PROFESORA DE PREESCOLAR, Y LA VERDAD ME HE DADO CUENTA QUE A LOS NIÑOS(as) LES ENCANTA MANIPULAR Y EXPLORAR, LOS LIBROS, RECREAR LAS LECTURAS, PERO DESGRACIADAMENTE CON EL USO, A PESAR DE QUE TRABAJAMOS EL CUIDADO DE LOS LIBROS, PUES ESTOS, SE DETERIORAN. QUISIERA SABER SI EXISTE ALGUNA MANERA DE RECUPERARLOS, YA QUE SON LIBROS QUE LES FASCINAN A LOS NIÑOS(AS), HE REALIZADO ACTIVIDADES CON PADRES DE FAMILIA: HOSPITAL DEL LIBRO, PERO AUN ASI SE DETERIORAN. DONDE SE PUEDEN CONSEGUIR O HAY ALGUNA MANERA QUE A TRAVES DE LAS SUPERVISIONES LOS REPONGAN?

Unknown dijo...

SOY PROFESORA DE PREESCOLAR, Y LA VERDAD ME HE DADO CUENTA QUE A LOS NIÑOS(as) LES ENCANTA MANIPULAR Y EXPLORAR, LOS LIBROS, RECREAR LAS LECTURAS, PERO DESGRACIADAMENTE CON EL USO, A PESAR DE QUE TRABAJAMOS EL CUIDADO DE LOS LIBROS, PUES ESTOS, SE DETERIORAN. QUISIERA SABER SI EXISTE ALGUNA MANERA DE RECUPERARLOS, YA QUE SON LIBROS QUE LES FASCINAN A LOS NIÑOS(AS), HE REALIZADO ACTIVIDADES CON PADRES DE FAMILIA: HOSPITAL DEL LIBRO, PERO AUN ASI SE DETERIORAN. DONDE SE PUEDEN CONSEGUIR O HAY ALGUNA MANERA QUE A TRAVES DE LAS SUPERVISIONES LOS REPONGAN?